Apuntes biográficos/históricosCompositor, director de orquesta y profesor español. Nació en Tárrega (Lérida, España) el 24 de octubre de 1789 y falleció en Madrid el 17 de marzo de 1855. Comenzó su formación musical en su localidad natal con el maestro Buenaventura Feliù.Ingresó en 1799 como niño de coro de la catedral de Seo de Urgel, donde continuó sus estudios con el maestro de capilla Bruno Pagueras, el organista Antonio Coderech y el violinista Félix Roig. Cumplidos los 17 años, se trasladó a Barcelona en cuya catedral estudió con el organista Carlos Baguer y con el maestro de capilla Francisco Queralt.
En la capital catalana se familiarizó con el repertorio operístico del momento, que le marcaría definitivamente en su carrera musical. Durante la invasión napoleónica se refugió Mahón, donde trabajó como organista en el convento de los franciscanos e impartió clases de canto y piano. Volvió a Barcelona en 1814 para dedicarse a la enseñanza, la dirección y la composición.
Viajó a Italia para contratar a los cantantes que formarían la compañía de ópera del Teatro de la Santa Cruz de Barcelona en 1815, dirigida por Pietro Generali. Compartió con él las siguientes temporadas, hasta 1820 en que Carnicer quedó como único director de este coliseo. Allí dio a conocer sus primeras composiciones, como una obertura para "Il barbiere di Siviglia" (1818) que fue elogiada por el propio Gioachino Rossini, y las óperas "Adele di Lusignano" (1819), "Elena e Costantino" (1821) e "Il dissoluto punito o sia Don Giovanni Tenorio" (1822), con notable acogida.Por su ideología liberal y demócrata, tras el Trienio Constitucional, se exilió con su familia a París y Londres, entre 1824 y 1827. En la capital inglesa publicó "Six spanish airs" (1826) y, por encargo del embajador de Chile Mariano de Egaña, compuso en 1827 un himno patriótico, que fue adoptado más tarde como himno nacional de Chile. Ese año regresó a Barcelona y, al poco tiempo, fue obligado por el rey Fernando VII a trasladarse a Madrid para ejercer como director y compositor de los teatros de la Cruz y del Príncipe, en sustitución del italiano Saverio Mercadante.En 1830 pretendió la plaza de maestro de la real capilla, que le fue denegada por sus antiguos ideales políticos. Fue nombrado, en 1831, maestro de composición en el recién creado Conservatorio de Música María Cristina, del que fue director interino en varias ocasiones. Entre sus alumnos destacan Pedro Tintorer, Rafael Hernando, Joaquín Gaztambide y Francisco Asenjo Barbieri, que siempre le veneró como maestro.Hasta 1845 dirigió los citados teatros de Madrid, en los que introdujo mejoras y novedades, tanto en las orquestas y coros como en la programación. En ellos dio a conocer sus óperas "Elena e Malvina" (1829), "Colombo" (1831), "Eufemio di Messina ossia I Sarraceni in Sicilia" (1832) e "Ismalia ossia Morte ed amore" (1838).Fuera de esta actividad, estrenó "Stabat Mater" de Gioachino Rossini en la iglesia de San Felipe el Real en 1833 y dirigió el Teatro del Circo en 1842. Fue miembro de la Junta Filarmónica para la creación de óperas españolas (1837) y profesor de armonía del Liceo Artístico y Literario de Madrid (1839).Como autor, además de los títulos citados, compuso música para orquesta, para tecla, de cámara, varios himnos, piezas conmemorativas y obras religiosas como "Misa a ocho voces a gran orquesta" (1828), "Misa de difuntos a ocho voces, para la Reina Josefa Amalia de Sajonia" (1829) e "Invitatorio y primer nocturno de difuntos, para las exequias del rey Fernando VII" (1834). También escribió canciones, con acompañamiento de orquesta, piano o guitarra, como "La cantinera", "El caramba", "El no sé", "La criada", "El chairo" o "El poder de las mujeres", que llegaron a ser populares.